Coaching de Pareja
La pareja es un proceso y, como tal, necesita actualizar sus vínculos para adaptarse a las nuevas situaciones y retos. Si los procesos individuales acaparan la atención de cada uno, se generan caminos cada vez más divergentes en los que se pierde el sentido original y la pareja se disuelve.
En este sentido, el Coaching no solamente es efectivo como proceso individual, sino también para la pareja.
El Coach es un facilitador, un acompañante. No enseña directamente, sino que provee herramientas para que el aprendizaje tenga lugar y observa que se utilicen correctamente. No es alguien que dice al cliente lo que tiene que hacer, sino alguien que ayuda al cliente a que aprenda a descubrirlo por sí mismo. A que aprenda a encontrar su propio camino de la felicidad en su pareja.
Motivos de dificultades en pareja
Los vínculos positivos suceden cuando ambos se tratan con amabilidad, cariño y respeto e intercambian emociones positivas (amor, afecto, alegría, felicidad, gratitud, humor, risas, complicidad, satisfacción sexual…).
Los vínculos negativos ocurren cuando uno de los dos (o ambos) critica, regaña, castiga, grita, ignora, rechaza, controla y/o trata al otro con desprecio, suscitando emociones negativas (ira, rabia, culpa, resentimiento, miedo, tristeza, decepción, frustración, dolor…)
Ello lleva a situaciones extremas donde se plantea la separación cuando:
- Uno o ambos miembros de la pareja ha dejado de querer al otro.
- Existe un alto grado de incompatibilidad que hace imposible la convivencia.
Objetivos Coaching
El Coaching ayuda a identificar nuestras dificultades, bloqueos, obstáculos o creencias limitantes para poder encontrar pareja y mantenerla de forma estable.